La pasión

Jeanette Winterson

Se podría describir La pasión, como una novela que consta de dos núcleos narrativos en primera persona. Estos núcleos comienzan a entremezclarse en la tercera parte del libro y en la cuarta y última se funden.

El contraste en la novela, se expande a los escenarios en los que se desarrolla, Paris, Venecia, la estepa rusa.

En la obra, La pasión, adopta formas diversas. Es la fuerza que mueve la trama, pero también el mundo.

La pasión, dice la protagonista, está en algún lugar, entre el miedo y el sexo. La pasión no se deja dominar, nos domina y, en contadas ocasiones, en el sentido que habríamos elegido.

Winterson consigue combinar, el lirismo y la sensibilidad, con el humor y la fantasía, y la reflexión con la acción más alocada.

La novela pertenece al movimiento literario del posmodernismo. En la novela la forma del relato elimina al narrador omnisciente, mezcla perspectivas e incorpora lo poético, como otra función dentro del texto.

Sus pinceladas feministas, efectuadas de forma magistral, nos llegan hasta muy adentro.

La inclusión de la etapa histórica en la que esta narrada, junto con el ritmo que la impregna, hace que el interés no decaiga a lo largo de la novela,

Carmen Jiménez